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"aguante la gente con pensamiento crítico,porque son ellos los que hacen la diferencia,el resto solo sigue, tanto a los de un lado como a los del otro".
Una de las fiestas tradicionales correntinas, es la de "Angeles Somos".
Esa costumbre nace en la creencia popular de que este primer día de noviembre las almas infantiles visitan este mundo. En épocas pasadas la mortalidad infantil era alta, y en casi todas las casas había algún niño fallecido, a los que se rendía homenaje de esta manera.
Al caer la noche del día anterior comenzaban a aparecer los grupos de "angelitos", repiqueteando tambores hechos con latas, recorriendo las calles, con sus ingenuas serenatas casa por casa, llevando una bolsita para guardar los regalos que les hacían.
Apenas instalados al pie de alguna ventana o en la puerta entonaban sus versitos: "Ángeles somos, ángeles somos, venidos del cielo, traemos esta serenata pidiendo una limosna por caridad de Dios...
" Por supuesto, en cada casa estaban preparados para agasajarlos con chipá, pastelitos, empanadas y algunas golosinas.
(Fragmento del texto publicado por tío Pirincho Ponce de León)
